Decimo día. Bucarest

Ateneo

  El desayuno del hotel no está mal. Como todos tiene poca bollería y tampoco tiene cacao, pero se puede salir satisfecho. Nuestra primera visita la tenemos al lado. Un mostrador de información atiende las consultas con los distintas opciones de entrada posibles. La estándar vale 35 lei y la hay hasta de 55lei con visitas a la terraza y los sotanos. Cogemos la estándar por ser en español. Estamos 1h 15’ viendo salas y pasillos enormes. Con decorados en madera y mármol de bonita elaboración. Terminamos
asomándonos al balcón que da al Bulevar Unirii.

     

     Desde aquí caminamos callejeando hasta el parque Cismigiu donde recorremos la orilla del lago para acabar tomando una cerveza en un kiosco. Salimos en dirección a la calle Victoriei por donde vemos el Ateneo y el Museo nacional de arte, hasta llegar a la plaza de la revolución.

Pasaje de Macca	Plaza de la Universidad

    Un poco más adelante surgen pequeñas plazas con grandes edificios como el círculo militar. Aquí giramos a la izquierda hasta la plaza de la universidad próxima a varias facultades y al museo municipal de la ciudad, y paramos a hidratarnos con una limonada. Volvemos a meternos en la ciudad vieja cruzando los animados pasajes de Macca y Vilacrosse, recorremos la calle Lipscani hasta la plaza Roma y bajamos hasta la plaza Unirii por el bulevar Bratiar, donde hay un centro comercial con muchas marcas conocidas que encontramos en cualquier ciudad de Europa.

Iglesia de San Antonio	Iglesia de Stravopoleus

     Entramos por la calle Caldarari al barrio viejo hasta la iglesia de San Antonio, enfrente esta Hanu Lui Manuc, un restaurante en un sitio singular, nosotros seguimos hasta Caru cu Bere pasando por la iglesia de Stravopoleus. El restaurante está muy concurrido y merece una parada. La comida es como en cualquiera de los que hay por la zona pero el local es singular y además lo amenizan con bailes. 115lei. Como siempre después de cenar vamos paseando hasta el hotel.

Caru cu Bere	Parlamento