Llegamos al aeropuerto de Otopeni Bucarest en el horario previsto. Cogemos el equipaje de cabina y vamos hacia el control de pasaportes. Que en nuestro caso es suficiente con la tarjeta de identidad. En el camino pasamos por 2 oficinas de cambio de moneda y por si acaso cambiamos 20€ por que el cambio no es bueno 1€=4,22Lei. Casi no perdemos tiempo pero hasta las 10 no estamos
fuera.
Seguimos las indicaciones de Rentacar y buscamos el mostrador de Nextauto pero no tiene. Lo que si nos da tiempo de localizar al lado es otra oficina de cambio con una cotización de 1€=4,48Lei, que es bastante buena. Al final preguntamos a un rumano con una cartulina de KlassWagen que es otra compañía de coches que tampoco tiene oficina y se presta a llamar a nuestro proveedor que en 10’ se presenta en el vestíbulo. Mientras hemos comprado en un puesto de prensa una tarjeta telefónica prepago de orange por 65Lei que allí mismo nos configuran y activan en el teléfono para tener datos de internet y minutos de llamadas que podamos necesitar.
Nos llevan en coche a 500m donde está la oficina de Nextauto en una parcela próxima, y hacemos el papeleo con la temida retención de franquicia que por si acaso hemos asegurado. Como el coche es un poco mejor; un Hyundai i20 la franquicia es de 1200€. Aunque tiene un poco mas de 100000 km y algunos arañazos y pequeños golpes que quedan reflejados en el contrato y las fotos que le hacemos, el coche está bien y es amplio pero se le nota que tiene mucho uso. Por fin a las 11 tenemos el coche y aunque en nuestro contrato venía con el depósito lleno este lo tiene en reserva.
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